Cómo realizar tu propia sesión de producto con fondo blanco
Hacer fotos de producto con fondo blanco puede parecer un desafío, pero con las herramientas adecuadas y un poco de creatividad, es posible lograr resultados profesionales sin necesidad de equipos costosos. En este artículo, aprenderás los materiales necesarios, el proceso paso a paso y algunas técnicas básicas de postproducción utilizando herramientas accesibles como Canva, editores de iPhone o Photoshop.
Materiales necesarios
Antes de comenzar, asegúrate de contar con los siguientes materiales:
Antes de la sesión
1. Equipo fotográfico:
Un smartphone con buena cámara (como un iPhone o Android de gama media/alta).
Una cámara básica, si la tienes.
2. Fondo blanco:
Papel blanco o cartulinas grandes.
Una caja de luz si puedes hacerte con una.
Tela blanca sin arrugas.
En caso de que uses tela, una plancha para corregir arrugas.
3. Soporte para el fondo:
Clips o cinta adhesiva para fijar el papel o tela.
Un soporte o mesa para colocar el producto.
4. Iluminación:
Lámparas LED blancas o luces suaves.
Reflectores caseros (puedes usar cartón blanco o papel de aluminio).
5. Accesorios de limpieza:
Paños de microfibra.
Alcohol isopropílico para limpiar superficies.
Pinceles pequeños para detalles.
Durante la sesión
6. Soporte para la cámara o móvil:
Trípode ajustable.
Un soporte sencillo para smartphones.
7. Cinta adhesiva, plastilina o bluetack:
Para estabilizar productos pequeños o que se tambalean.
Después de la sesión
8. Programas de edición gratuitos:
- Canva (versión gratuita).
- Editor de fotos integrado en iPhone o Android.
- GIMP (una alternativa gratuita a Photoshop).
- Photoshop, si ya lo tienes.
Proceso paso a paso
1. Prepara el espacio de trabajo
Encuentra un lugar bien iluminado, preferiblemente cerca de una ventana para aprovechar la luz natural. Si no tienes acceso a luz natural, usa lámparas LED blancas y colócalas a los lados del producto para evitar sombras duras.
Coloca tu fondo blanco en una superficie plana o en un soporte vertical. Asegúrate de que no tenga arrugas ni manchas visibles.
2. Limpieza de los productos
Antes de fotografiar, limpia cuidadosamente cada producto para evitar reflejos no deseados, polvo o manchas que puedan ser visibles en la imagen. Usa un paño de microfibra para superficies lisas y un pincel pequeño para detalles o esquinas.
3. Configura tu equipo
Si usas un smartphone, activa el modo HDR para capturar detalles tanto en las luces como en las sombras.
Ajusta la resolución de la cámara para obtener la máxima calidad posible.
Utiliza un trípode o soporte para mantener la cámara estable y evitar fotos movidas.
4. Encuadra el producto
Coloca el producto en el centro del fondo blanco y asegúrate de que esté bien iluminado.
Punto de vista: Fotografía el producto a la altura de los ojos del cliente. Por ejemplo, para un tarro, toma una foto frontal; para un zapato, considera un ángulo lateral o desde arriba.
Espacio: Deja suficiente espacio alrededor del producto para recortarlo después si es necesario.
5. Ajusta la luz
Asegúrate de que la iluminación sea uniforme y no genere sombras duras. Si hay sombras, utiliza un reflector casero (como cartón blanco) para suavizarlas.
Si usas lámparas, colócalas a 45º de los lados del producto para iluminar de manera uniforme.
6. Realiza las tomas
Haz varias fotos desde diferentes ángulos y distancias.
Verifica el enfoque para asegurarte de que todos los detalles importantes estén nítidos.
Experimenta con la configuración de la cámara para ajustar la exposición y el balance de blancos.
Postproducción básica
Una vez que hayas tomado las fotos, es hora de editarlas para mejorar su apariencia y garantizar un fondo blanco limpio y uniforme. A continuación, te mostramos opciones con herramientas accesibles:
1. Canva (versión gratuita)
Sube tus fotos a Canva.
Utiliza la herramienta de recorte para ajustar el encuadre.
Si el fondo blanco no está uniforme, agrega un fondo blanco adicional utilizando elementos de diseño.
2. Editor de fotos del iPhone/Android
Ajusta el brillo y el contraste para resaltar el producto.
Usa la función de recorte para eliminar elementos no deseados del encuadre.
Corrige las sombras o resalta los detalles con las herramientas de iluminación.
3. Photoshop o Gimp
Abre la imagen y utiliza la herramienta de selección para aislar el producto.
Rellena el fondo con un blanco puro (#FFFFFF) para una apariencia uniforme.
Ajusta los niveles (Ctrl+L) para corregir el brillo y contraste.
Guarda el archivo en formato PNG o JPEG, según las necesidades.
Consejos finales
1. Revisa los detalles: Antes de finalizar, asegúrate de que no queden imperfecciones visibles, como motas de polvo o bordes mal recortados.
2. Consistencia: Si trabajas con varios productos, mantén la misma configuración de luz y ángulos para lograr uniformidad.
3. Prueba diferentes fondos: Aunque el fondo blanco es un estándar, puedes experimentar con fondos de colores claros o texturas sutiles para resaltar ciertos productos.
Con este proceso, podrás crear fotos de producto de alta calidad que reflejen profesionalismo y ayuden a destacar tu marca. Dedica tiempo a cada paso, y con la práctica, tus resultados mejorarán cada vez más.